CASO #37 Juno y el optimismo ácido de Diablo Cody

“I don’t see what anyone can see 

In anyone else. But you” 

Yo acabé con un nudo en el estómago. Y es que Juno es una comedia fantásticamente trágica, pero muy optimista. Muy moderna y de la que espero que vengan otras más. Con solo la música, la película es realmente conmovedora e inteligente. Ellen Page hace una interpretación que hace envidiar a cualquier actriz experimentada: logra una actuación sincera (si se puede hablar así de las actuaciones). Page carga con el personaje de Juno y todo lo que este lleva consigo, si se puede hablar así de su papel de una chica de 16 que se queda embarazada de un amigo en el instituto. El personaje de Ellen Page sería la Jody Foster de Taxi Driver o el Antonine Doinel de Los 400 golpes.

Dirigida por Jason Reitman, Juno tiene mucho del estilo de Pequeña Miss Sunshine (Jonathan Dayton, Valerie Faris), estrenada dos años atrás y premiada en el festival de cine independiente de Sundance. Recibió el premio a Mejor Guion original en los Oscar y en los BAFTA del año 2007 y otra decena de premios sobre todo para la actriz protagonista (ahora conocida más por Origen).

El plato fuerte de Juno, como buena comedia que es, se encuentra en el guion. Es duro hablar, y más en una película, de lo que llamamos embarazos no deseados (¿por relaciones sexuales no deseadas?), pero Diablo Cody, la guionista, desgarradora de tabúes, lo hace divinamente. Con pelos y señales en algunas conversaciones, quizá demasiadas, de la película. No se reserva nada y con un ritmo que no te deja apartar los ojos de la pantalla. Juno es la historia de una chica con agallas que afronta su embarazo, no sin antes pasar la prueba del intento de aborto (genial la secuencia de las uñas de las manos de los niños – me entenderá quien haya visto la película–). Uno a uno Diablo Cody va desgranando las fases más comunes por las que pasa una chica después de quedarse embarazada, no ya involuntariamente sino como resultado de tomarse las relaciones como un juego. Juno y su amiga tienen, como dicen ellas, su propia “vida sexual” de quinceañeras, que por supuesto la mantienen al margen de sus padres: otra crítica a los padres que pasan de hablar de estos temas con sus hijos. Esta es la razón por la que los últimos en enterarse del embarazo de Juno sean los padres (incluso el dependiente de la tienda de comestibles se entera antes). 

Juno hará frente a su nuevo “planeta” no sola sino con la ayuda de su familia, su amiga y poco a poco de su novio. Juno es una mujer con carácter, fuerte en los momentos más duros pero que (¡tiene solo 16 años!) también se puede romper. Sin embargo, la guionista, con experiencia en el tema, deja claro que son ellas las fuertes, las que no pueden abandonar y tienen que cargar con la responsabilidad porque quedarse solas es una opción (aunque no en este caso). 

No hay chistes fáciles aunque puede ser un poco duro escuchar a dos adolescentes hablar de su vida sexual, un poco ácida pero que irá madurando. Por ejemplo, es muy directa la conversación de Juno a raíz del trote freudiano de los corredores de atletismo. La clave de la película es esta evolución de Juno de hacer frente a los problemas, acompañada y enamorada (“Sé que la gente suele enamorarse antes de quedarse embarazada, pero supongo que la normalidad no es nuestro estilo”, dice Juno). Una película que acaba con un plano icónico que se sintetiza en una canción (You are a part-time lover / and a full-time friend) y se plasma visualmente (no desvelo nada a quien quiera verla) con Juno al pie de su casa y de su futuro.

Mejor ver la en película en versión original – sino parece que estamos viendo una comedia de bajo presupuesto y "cutre" por el doblaje –. Y atentos a la letra de las canciones.